jueves, septiembre 19, 2013

Diagnóstico diferencial entre el síndrome de Guillain Barré y CIDP

Revista Cubana de Investigaciones Biomédicas

Rev Cubana Invest Bioméd v.27 n.3-4 Ciudad de la Habana jul.-dic. 2008
Contribución de la electrofisiología al diagnóstico diferencial entre el síndrome de Guillain Barré y la polineurorradiculopatía desmielinizante inflamatoria crónica

Contribution of electrophsyiology to the differential diagnosis between Guillain Barré syndrome and chronic inflammatory demyelinizating polyneuroradiculopathy


Aymeé Hernández Hernández
Doctora en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado en Fisiología Normal y Patológica. Investigadora agregada. Departamento de Neurofisiología Clínica. Hospital Clinicoquirúrgico Docente "Carlos J. Finlay". Ciudad de La Habana. Cuba.



RESUMEN


INTRODUCCIÓN: El síndrome de Guillain Barré (SGB) y la polineurorradiculopatía desmielinizante inflamatoria crónica (CIDP) comparten similitudes. Se diferencian en su inicio, curso, evolución, pronóstico y respuesta al tratamiento, pero existe dificultad en su diferenciación en la práctica clínica. OBJETIVOS: Comparar el patrón de alteración de los estudios electrofisiológicos en pacientes con SGB y CIDP para buscar diferencias entre ambas, con el fin de contar con una herramienta que contribuya al diagnóstico diferencial de ambas enfermedades. MÉTODOS: Se estudiaron 18 pacientes con SGB y 27 con CIDP a quienes se les realizó estudio de conducción y onda F. RESULTADOS: Existieron diferencias significativas entre las variables evaluadas en estos estudios en ambos grupos de enfermedades. Se demostró que en ambas existe afectación de las fibras motoras, y que esta es mayor desde el punto de vista sensitivo en la CIDP. El patrón electrofisiológico de afectación fue diferente en ambas enfermedades. CONCLUSIONES: A través del estudio de conducción nerviosa y de la onda F se puede diferenciar al SGB de la CIDP.
Palabras clave: Polineurorradiculopatía desmielinizante inflamatoria crónica, síndrome de Guillain Barré, electrofisiología, conducción nerviosa, diagnóstico diferencial, onda F.


CIDP - larga licencia médica por segunda vez

El 01 de diciembre de 2010 comenzó este largo periodo de licencia médica nuevamente... lo que parecía agotamiento o cansancio "normal" por las actividades de fin de año se transformó nuevamente en síntomas propios de CIDP, aunque no quisiera reconocerlo, esta enfermedad siendo crónica, es recurrente y en cualquier momento se hace notar y el retroceso es inevitable. Pero los medicamentos, los cuidados y el descanso hacen que la recuperación también sea posible...ya han pasado varios meses y cada vez me siento mejor...ha sido dificil, doloroso y agotador, física y mentalmente, pero ya estoy en franca recuperación. Gracias a las dosis de corticoides (80 ml dia por medio) y al inmunosupresor (Imuran cada 12 hrs dia por medio)...se puede.
El tratamiento con inmunoglobulina no fue tan eficaz como se esperaba y creo que a pesar de todo sirve...pero en mi caso el efecto es poco y casi no hay respuesta positiva de mi organismo hacia este. Se que en otros casos es diferente, pero para mi sólo significó un alto costo que pagar a la clinica y no aceleró la recuperación...
No importa, se hizo lo que había que hacer y puse todo de mi parte...si no lo hubiera hecho tendría la duda y seguiría pensando que quizá con inmunoglobulina habría mejorado más rápido.

Doy gracias a Dios porque puedo sentirme mejor y hacer una vida relativamente normal, creo que pronto podré volver a trabajar y muscular y neurologicamente tendré que recuperar terreno cada vez más.
Hice una página en facebook ( CIDP polineuropatia ) para quienes conozcan, o quieran conocer más de esta enfermedad.
“La pesada carga de la realidad.

¿Podemos soportar la pesada carga de la realidad?
¿Cómo podemos permanecer abiertos a todas las tragedias humanas y conscientes del vasto océano de sufrimientos humanos sin llegar a sentirnos paralizados o deprimidos?
¿Cómo podemos vivir de una forma sana y creadora cuando se nos recuerda constantemente el hecho, en apariencia sin solución, de la existencia de millones de hombres pobres, enfermos, hambrientos y perseguidos?...
Desconozco la respuesta a todas estas preguntas.

…¿Qué es lo que nos impide abrir nuestros corazones a la realidad del mundo?
¿Será que no podemos aceptar nuestra incapacidad y sólo queremos ver las heridas que podemos curar?
¿Será que no queremos abandonar la ilusión de que somos los dueños del mundo…?
¿Será que nuestra ceguera y sordera son signos de nuestra resistencia a reconocer que no somos los dueños y señores del Universo?
La vida puede enseñarnos que aunque los acontecimientos diarios están fuera de nuestras manos, nunca deben estar fuera de nuestros corazones y que, en vez de sentirse más amargadas, nuestras vidas deben llegar a asimilar la sabiduría de que las respuestas creadoras pueden proceder solamente del corazón.
En la soledad del corazón podemos escuchar realmente las penas del mundo porque ahí somos capaces de reconocerlas no como sufrimientos extraños, con los que no estamos familiarizados, sino como sufrimientos con los que estamos perfectamente identificados.
Sería paralizante proclamar que nosotros, como individuos, somos responsables de todos los sufrimientos humanos, pero es un mensaje de liberación decir que somos llamados a responder al llamamiento de ayuda y alivio que ese sufrimiento nos lanza. Porque desde el fondo de nuestra solidaridad con nuestros semejantes es de donde realmente surgen los primeros intentos de aliviar esos sufrimientos”.

Henri J. M. Nouwen, Tres etapas en la vida espiritual. 1995, pp. 52-56.